Desde las alturas de la cordillera de la Costa, paralelo a la ruta del Toltén, nace y se desliza hacia el océano el imponente río Queule. En sus aguas cristalinas, repletas de vida submarina, se refleja a simple vista aquello que lo distingue del resto de ríos de la región: una rica biodiversidad repartida en decenas de humedales costeros.
Dentro de la comuna de Toltén, los humedales del Río Queule son el panorama turístico por excelencia. Con 5.700 hectáreas de extensión, este espacio geográfico permite el desarrollo de la vida para un sinfín de flora, aves y algunos mamíferos pequeños. Razón por la que desde el año 2002, el territorio pertenece al listado de 11 Sitios Prioritarios de Biodiversidad de la Región de La Araucanía.
Algunas de las especies de aves que habitan los humedales son el cisne de cuello negro, el pato jergón, garzas, taguas, el clásico martín pescador y pequeños amigos como el siete colores y el zarapito. En cuanto a los mamíferos que se mueven entre los juncos, la lista es mucho más acotada; destacando criaturas como la güiña, el zorro colorado, la liebre y el coipo.
Pero la importancia ecológica de los humedales va mucho más allá de su rica biodiversidad.
Entre los tipos de humedales que existen, destaca el de tipo turbera. Cuerpos naturales compuestos en un 90% por agua, capaces de almacenar grandes cantidades de carbono. Gracias a esta característica, las turberas representan un gran aporte en la eliminación de gases de efecto invernadero, y por ende, ayudan a retrasar el progresivo calentamiento de la superficie terrestre.
En la actualidad, una de las amenazas más grandes que afecta a los humedales es su drenaje y relleno para uso agrícola y ganadero. Esta práctica es muy común en sectores rurales de Chile y al alterar el ecosistema de los humedales, provoca que éstos comiencen a emitir los gases de efecto invernadero que acumulan. Bajo este contexto, fomentar la protección de los humedales se vuelve una tarea indispensable, en la que el turismo juega un papel clave en la difusión de su gran valor ecológico y cultural.