Puntos turísticos
Parque Nacional Huerquehue: Un día en las patas del monito del monte
PorAraucanía Infinita
Publicado el
Créditos imagen: Portada: Creative Commons, José Luis Bartheld

Comparte en:

Su particular rostro de ojos grandes y negros, sus hábitos nocturnos y su muy reducido tamaño, hacen que el monito del monte sea una criatura que pasa desapercibida. Pero como dice el dicho popular, lo bueno viene en frasco chico: la importancia de este mamífero, conocido también como fósil viviente, es fundamental para nuestro ecosistema.

Cuando ya no queda ningún rayo de sol este trasnochador mamífero marsupial se asoma al exterior, comiendo semillas e insectos que aprisiona ágilmente. Zorros chilla y aves rapaces intentan amenazarlo, pero para él ni el tamaño ni las garras importan, porque ninguno tiene su habilidad de visión nocturna ni su sigilosa agilidad que le permite sortear toda posible amenaza.

De una sensibilidad auditiva y visual digna de un artista docto, nuestro amigo nochero prefiere dormir de día en los huecos de troncos o en las copas de los árboles, para proteger sus sentidos de los estímulos excesivos que perturban su seguridad y calma. 

Las leyendas dicen que el monito del monte nació del huevo de una gallina que fue empollada por una serpiente, por lo que trae mala suerte. Pero como cualquier minoría rezagada por su diferencia, estos rumores puede deberse a la extrañeza y escasez de su linaje , y el hecho de que solo deambule de noche; lo transformen en un mito para desviar los pesares humanos.

Lo que la leyenda omite es justamente el lado bueno. Los monitos del monte son protagonistas en la conservación de los bosques nativos. Son ellos los encargados de repartir semillas, controlar plagas y mantener la biodiversidad de la zona. Pero tristemente se encuentran en peligro de extinción, estimando el descenso de su población en un 20 por ciento. Esto debido a la deforestación e introducción de fauna doméstica en su hábitat.

En el Parque Nacional Huerquehue, CONAF liberó monitos del monte para prevenir su extinción y para continuar con la tarea de conservación de flora y fauna autóctona. 

Acércate al parque por el acceso de camino asfaltado del lago Caburga y, si tienes “mala suerte”, te podrás cruzar a este minúsculo pero imprescindible monito, único en su especie.

________

Enlace para reservar la visita al parque aquí. 

Relacionados

emprendimientos

Fogón de la Papay: Gastronomía mapuche

emprendimientos

Biergarten Klein: Un oasis cervecero

emprendimientos

Granja Chankín: Patos de Trankurra

emprendimientos

Los Pioneros: Tu hogar en la montaña

emprendimientos

Hotel Boca Budi: Todas las bondades del mar en un sólo lugar

emprendimientos

Hotel Mapuche Wallmapu: Único hotel mapuche de La Araucanía